jueves, 20 de noviembre de 2014



Según el Consejo Nacional de Seguridad y Defensa de Ucrania, la Federación de Rusia sigue acumulando fuerzas en la frontera, incluidas estaciones de radar y aviones de combate MiG-31 Foxhound, interceptores capaces de alcanzar una velocidad máxima de Mach 2.83.
Una cantidad no especificada de MiG-31 basados ​​en Perm se han desplegado en el campo de aviación de Millerovo, en la región de Rostov, cerca de la frontera con Ucrania. Esto es señal de que Moscú podría estar preparándose para controlar activamente el espacio aéreo sobre Luhansk Oblast.
El MiG-31 es un derivado biplaza del MiG-25 y entró en servicio en 1981. Diseñado para hacer frente a los bombarderos estratégicos supersónicos de Estados Unidos que vuelan a baja altura (B-1B Lancer), el MiG-31 tiene muy buenas prestaciones y cuenta con un radar look-down-shut-down. El avión es menos maniobrable que los MiG-29 y Su-27, pero sigue siendo un interceptor increíble, con una velocidad máxima de Mach 2,83 y un radio de acción de 1.450 kilómetros, mayor si incorpora depósitos extras.
A pesar de que la producción del MiG-31 terminó a principios de 1990, el interceptor se está actualizando para ampliar su vida operativa hasta el 2030, hasta que su reemplazo esté disponible.
Mientras tanto, la Fuerza Aérea de Rusia tiene planes para basar la aeronave en el aeródromo de Tiksi, situado en la costa rusa del Océano Ártico.
Según el Gobierno de Ucrania, además de los MiG y los radares, se ha informado de que tanques rusos han cruzado la frontera, mientras que cientos de piezas de equipo militar se han desplegado por la Federación de Rusia dentro de Ucrania.


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