martes, 10 de marzo de 2015

F-16, P-51, A-10 y F-15C volando sobre Nueva York


La Fuerza Aérea de los Estados Unidos va a asignar al papel de apoyo aéreo cercano a algunos de sus escuadrones equipados con F-15E y F-16, con el fin de ir retirando los A-10. La Fuerza Aérea de los Estados Unidos va a establecer una nueva organización para examinar la mejor forma de lanzar bombas y misiles en apoyo de las tropas de tierra en el futuro, como parte del plan del Pentágono para retirar al avión de ataque dedicado exclusivamente a esta misión. El general Herbert "Hawk" Carlisle dijo que el nuevo grupo CAS (Apoyo Aéreo Cercano) probablemente sea desplegado en la Base de la Fuerza Aérea Nellis, en Nevada, con la participación de otros servicios militares y el Comando de Operaciones Especiales. Es uno de los varios cambios que los militares harán cuando se retire el A-10 Thunderbolt II, ya que las autoridades de defensa quieren jubilarlo para ahorrar dinero, a pesar de las protestas del Capitolio. El apoyo aéreo cercano (CAS) se lleva a cabo por una variedad de aeronaves, incluyendo helicópteros, incluso el avión A-10 y los cazas F-15E Strike Eagle y F-16 Fighting Falcon. Cuando se retire el A-10, la Fuerza Aérea trasladará algunas escuadras para prestar el CAS a las tropas de tierra. "Vamos a colocar a los pilotos que actualmente cubren las misiones CAS en aviones F-15E y F-16, y posiblemente en el F-35" , dijo Carlisle. "Queremos que la experiencia adquirida con el CAS sea aprovechada en el futuro". El retiro de la A-10 es inevitable, a pesar de su sólido historial de combate durante las guerras en Irak y Afganistán, y su uso ahora contra Estado Islámico en Irak y Siria. Carlisle dijo que la Fuerza Aérea no descartó la posibilidad de que se buscase un nuevo avión 'AX' , un posible sustituto para el A-10. "Era necesario un cambio en la estrategia y la demanda de CAS requiere mas aeronaves a un costo más barato", dijo. El argumento de la Fuerza Aérea se ha cuestionado en varias ocasiones. Para el oficial del ejército, Maj. Benjamin Fernandes, si la Fuerza Aérea quiere ahorrar miles de millones de dólares, sería más prudente retirar uno de los varios modelos de la flota, como el F-15, el F-16 o el bombardero B-1B Lancer.

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