Durante su estancia de seis meses en, los pilotos del escuadrón 555, conocido como Triple Nickel, asumirán la responsabilidad de proveer apoyo aéreo cercano a las unidades terrestres desplegadas en Afganistán, reemplazando al destacamento belga que a cumplido hasta ahora esa función. "Ante todo, estamos aquí para proteger a los chicos en el suelo", dijo el teniente coronel Byron Pompa, comandante del 555. "Nuestros chicos no podrían estar más felices de estar aquí. Nos hemos preparado durante los últimos seis meses para esta misión y nuestros jóvenes chicos se muerden las uñas para llegar allí y ver algo de acción". El cuatro cazas F-16 de FS 555, desplegado en la Base Aérea de Colina, Utah, pasan con ello a realizar una rotación de seis meses en la zona de responsabilidad del Comando Central de Estados Unidos. La misión de la 455ª ala aérea expedicionaria es decisiva para garantizar el apoyo aéreo cercano a los soldados que defienden al gobierno de Afganistán, evitando que el país se convierta en un refugio seguro para los terroristas internacionales.
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