El portaaviones atómico Ronald Reagan, que atracó en una base militar estadounidense en Japón, podría alterar el equilibrio de poder en el conflicto del mar de China meridional, publicó el periódico tailandés Bangkok Post. El portaaviones Ronald Reagan será el buque insignia tanto en las operaciones humanitarias como en maniobras de entrenamiento y operaciones militares estadounidenses en el este y sudeste de Asia. Con la introducción de buques más modernos y mejor armamento, EEUU pretende alterar el equilibrio de poder en el conflicto territorial entre China y sus vecinos en el mar de China meridional, escribe el rotativo. “La presencia de barcos estadounidenses en la región es reflejo del compromiso de EEUU con la paz y estabilidad”, dijo refiriéndose a la presencia del Ronald Reagan el comandante del noveno grupo de ataque de portaaviones de EEUU, el contralmirante Patrick Pearce, citado por el periódico. Pekín reclama la soberanía sobre gran parte del mar de China Meridional, pero sus pretensiones territoriales se solapan con las de Filipinas, Vietnam, Malasia, Brunéi y Japón. La tensión se agudizó en los últimos meses cuando China abordó la construcción de islas artificiales cerca del archipiélago Spratly, una de las áreas disputadas. China construye islas artificiales trasladando arena sobre arrecifes de coral vivo, algunos de los cuales están sumergidos, y colocando luego cemento para pavimentarlos y convertirlos en una base con puertos.
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