F-16 de la Real Fuerza Aérea de Jordania
Veinte F-16 jordanos llevaron a cabo sus primeros ataques aéreos sobre objetivos del Estado Islámico (ISIS) en Siria desde que los militantes dieron a conocer un vídeo que muestra al piloto jordano capturado siendo quemado vivo en una jaula. En su camino de regreso, volaron sobre la ciudad natal del piloto, Mouath al-Kasaesbeh, a modo de homenaje. Su vuelo coincidió con una visita a la aldea natal del piloto por el rey jordano Abdullah II, que en esos momentos se reunía con la familia del piloto. El rey ha prometido represalias severas contra el Estado Islámico en respuesta a este brutal asesinato. "Para el rey Abdullah, la espantosa muerte de uno de sus pilotos es muy personal ya que es un piloto militar y oficial de operaciones especiales. La sangre del mártir Muath al-Kaseasbeh no habrá sido vertida en vano y la respuesta de Jordania y su ejército después de lo que le pasó a nuestro querido hijo será grave", dijo el rey Abdullah en una declaración emitida por la corte real de Jordania el miércoles, en la que enfatizó el compromiso de Jordania con la coalición internacional liderada por Estados Unidos para bombardear a los militantes del ISIS. Los objetivos del pasado jueves fueron atacados por una variedad de aviones de la coalición liderada por Estados Unidos contra el ISIS, pero la operación fue "asignada" a los jordanos en deferencia al horrible asesinato de su piloto. La Fuerza Aérea de Estados Unidos asignaron aviones cisterna y de guerra electrónica en apoyo al ataque. Los medios estatales jordanas no especificaron donde se realizó el ataque, pero funcionarios estadounidenses dijeron que 20 F-16 jordanos atacaron el jueves a las 13:00 h, hora local, cerca del bastión del ISIS en al-Raqqa, Siria, y dijeron que se empleó una gran cantidad de artillería.
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